El miércoles previo a la semana santa...
Día de pocos quehaceres en el trabajo. Se suspende la única clase del día que por cierto duraba hasta las 9 de la noche.
La persona con la que estás saliendo te propone formalizar y volverte su enamorada y tú le dices que sí pero pensabas que estaba bromeando y también le respondiste en broma.
Ida al cine. Película bastante sangrienta. Terminas un poquitín traumada y asqueada de ver cómo le cortan los dedos a la gent, la sangre salpica y los torturados gritan.
Vuelves a casa con planes de salir de nuevo a seguirla en un rato pero te quedas dormida en la sala, zzzzZZZZZ....
Jueves Santo
Ya no tienes nada de ropa limpia y te demoras varias horas con la radio prendida, lavando, lavando, tendiendo, tendiendo. Lavando, tendiendo. Recogiendo.
Día de pocos quehaceres en el trabajo. Se suspende la única clase del día que por cierto duraba hasta las 9 de la noche.
La persona con la que estás saliendo te propone formalizar y volverte su enamorada y tú le dices que sí pero pensabas que estaba bromeando y también le respondiste en broma.
Ida al cine. Película bastante sangrienta. Terminas un poquitín traumada y asqueada de ver cómo le cortan los dedos a la gent, la sangre salpica y los torturados gritan.
Vuelves a casa con planes de salir de nuevo a seguirla en un rato pero te quedas dormida en la sala, zzzzZZZZZ....
Jueves Santo
Ya no tienes nada de ropa limpia y te demoras varias horas con la radio prendida, lavando, lavando, tendiendo, tendiendo. Lavando, tendiendo. Recogiendo.
Visitas a tu abuela ya que no fuiste a la celebración de su cumpleaños por estar ocupada con el trabajo –si quieres que vaya a tu cumpleaños, no lo festejes el día de las elecciones presidenciales- y además de alimentarte como cerda, te quedas a dormir. Así como en los viejos tiempos.
Llamas a casa para avisar que te quedas:“Papá, me voy a quedar a dormir acá nomás” -y claro, se cercioran de la ubicación- “¡¡¿en dónde?!!”, “donde mi mamá Mila”, “ah ya, chau”.
Viernes Santo
Vuelves a casa un poco después de la hora de almuerzo y luego de unas horas te encuentras en Alcázar, sintiéndote un poco sola en una sala de cine que está casi exclusivamente para ti y la persona con la que fuiste.
Al salir del cine, una bola de heno rueda y piensas: “¿dónde se fueron todos?” y la persona que te acompaña dice: “de viaje”.
Entras a un McDonalds más que vacío y ordenas pero, quien iba a pagar la cuenta se fija que no traía efectivo. No está funcionando el sistema de tarjetas. Prometes volver luego de conseguir el efectivo.
Te quedas encerrada un rato en el cajero porque el botón de la puerta no funcionaba muy bien. Pero era demasiado bueno para ser verdad y la puerta se abre.
Llegas a McDonalds y ya han cerrado. Todos los comercios alrededor están cerrados, menos uno: Friday’s. ¿Será que es Friday’Santo?
Cuando ves la carta, muchos platillos de carne se ofrecen. Qué ricos. Pero espera, es Viernes Santo. Sí. Y tú eres católica.
Felizmente no lo logramos en McDonalds. Pides un postre.
Cuando se supone que estás camino a casa (ya de madrugada), te proponen enseñarte a conducir. Increíblemente, el auto quedó entero. Llegas a casa y zzzZZZZZ.
Llamas a casa para avisar que te quedas:“Papá, me voy a quedar a dormir acá nomás” -y claro, se cercioran de la ubicación- “¡¡¿en dónde?!!”, “donde mi mamá Mila”, “ah ya, chau”.
Viernes Santo
Vuelves a casa un poco después de la hora de almuerzo y luego de unas horas te encuentras en Alcázar, sintiéndote un poco sola en una sala de cine que está casi exclusivamente para ti y la persona con la que fuiste.
Al salir del cine, una bola de heno rueda y piensas: “¿dónde se fueron todos?” y la persona que te acompaña dice: “de viaje”.
Entras a un McDonalds más que vacío y ordenas pero, quien iba a pagar la cuenta se fija que no traía efectivo. No está funcionando el sistema de tarjetas. Prometes volver luego de conseguir el efectivo.
Te quedas encerrada un rato en el cajero porque el botón de la puerta no funcionaba muy bien. Pero era demasiado bueno para ser verdad y la puerta se abre.
Llegas a McDonalds y ya han cerrado. Todos los comercios alrededor están cerrados, menos uno: Friday’s. ¿Será que es Friday’Santo?
Cuando ves la carta, muchos platillos de carne se ofrecen. Qué ricos. Pero espera, es Viernes Santo. Sí. Y tú eres católica.
Felizmente no lo logramos en McDonalds. Pides un postre.
Cuando se supone que estás camino a casa (ya de madrugada), te proponen enseñarte a conducir. Increíblemente, el auto quedó entero. Llegas a casa y zzzZZZZZ.
Sábado de Gloria
Te levantas tarde y decides hacer limpieza. Empiezas por tu habitación. Varios kilos de papeles y polvo desaparecen de allí pero te percatas de que ahora el polvo está sobre ti. Sigues limpiando todo, hasta terminar limpiándote a ti.
Tu mejor amiga será violada en escena y vas a su muestra teatral. Llegas con algo de miedo al centro de Lima, echas la moneda en el sombrerito (sí, por adelantado) y disfrutas.
Tus amigos te comentan que no sabían que “estabas” con el chico que te acompaña. Tú respondes que no “estás” sino que estás saliendo nomás. El chico que te acompaña se sorprende y reclama. Te enteras que el miércoles previo ya habías aceptado “estar” con él. Se anula el periodo en el que “estuviste” porque no te habías enterado de que “estabas”.
Hoy se celebra el cumpleaños de una amiga de la persona con la que “estabas” pero no te enteraste que “estabas”. Decides tomar un bus que llega muy rapidito al lugar donde te diriges. Ahí en el micro, cantas canciones del recuerdo que se oían en La Inolvidable, radio que sintonizó el chofer. Le propones a tu acompañante que mejor reiniciemos la cuenta desde ese día y acepta. Ahora sí “estás” con él, ¡yeah!
Luego de ir a comprar vodka y vasitos descartables, llegas a la reunión. Ves un ratito a Ollanta Humala en la tele y luego cantas las canciones de los videoclips. Mejor vamos a un karaoke.
Llegamos al karaoke. Cantas muchas más canciones. Te dan el micro para una de Alejandra Guzmán.
Viene el serenazgo, ya es hora de cerrar y te botan del karaoke sin dejar que tu mesa cante una última canción. Vuelves a casa y zzzZZZZZ.
Domingo de Resurrección
Te levantas muy tarde. Desayunas. Tienes una llamada perdida de tu nuevo enamorado. Timbras. Te llama de nuevo y te pregunta qué quieres hacer hoy. Como siempre, no tienes idea.
Te levantas tarde y decides hacer limpieza. Empiezas por tu habitación. Varios kilos de papeles y polvo desaparecen de allí pero te percatas de que ahora el polvo está sobre ti. Sigues limpiando todo, hasta terminar limpiándote a ti.
Tu mejor amiga será violada en escena y vas a su muestra teatral. Llegas con algo de miedo al centro de Lima, echas la moneda en el sombrerito (sí, por adelantado) y disfrutas.
Tus amigos te comentan que no sabían que “estabas” con el chico que te acompaña. Tú respondes que no “estás” sino que estás saliendo nomás. El chico que te acompaña se sorprende y reclama. Te enteras que el miércoles previo ya habías aceptado “estar” con él. Se anula el periodo en el que “estuviste” porque no te habías enterado de que “estabas”.
Hoy se celebra el cumpleaños de una amiga de la persona con la que “estabas” pero no te enteraste que “estabas”. Decides tomar un bus que llega muy rapidito al lugar donde te diriges. Ahí en el micro, cantas canciones del recuerdo que se oían en La Inolvidable, radio que sintonizó el chofer. Le propones a tu acompañante que mejor reiniciemos la cuenta desde ese día y acepta. Ahora sí “estás” con él, ¡yeah!
Luego de ir a comprar vodka y vasitos descartables, llegas a la reunión. Ves un ratito a Ollanta Humala en la tele y luego cantas las canciones de los videoclips. Mejor vamos a un karaoke.
Llegamos al karaoke. Cantas muchas más canciones. Te dan el micro para una de Alejandra Guzmán.
Viene el serenazgo, ya es hora de cerrar y te botan del karaoke sin dejar que tu mesa cante una última canción. Vuelves a casa y zzzZZZZZ.
Domingo de Resurrección
Te levantas muy tarde. Desayunas. Tienes una llamada perdida de tu nuevo enamorado. Timbras. Te llama de nuevo y te pregunta qué quieres hacer hoy. Como siempre, no tienes idea.
Te bañas. Pones a lavar la ropa que ya ensuciaste, mientras se lava, te sientas a TU Pc después de muchos días. Revisas mails, respondes mails. Avanzas un poco del trabajo del lunes y escribes un post recontra light que te recuerde el lunes que aunque estés tan ocupada, tuviste una interesante Semana Santa y sin salir de Lima.
8 comentarios:
qué manera tan sutil de presentar al nuevo novio...
-Desde la oficina-
No es una presentación, solo es una anécdota.
Celoso.
Eeeeeh... los felicito por acá hasta que Mr. J. abra blog o al menos un log técnico de linux :).
La persona con la que estás saliendo te propone formalizar y volverte su enamorada y tú le dices que sí pero pensabas que estaba bromeando y también le respondiste en broma.
¿Cómo te atreves a jugar con los sentimientos de mi mejor amigo?
GrrrrrrrRRRRRRRRRRRR
Felicitaciones. Saludos a mi cuñado.
Sr Magnus y Mauricio:
Gracias :)
Flavio:
Andáaaaaa...!
Quien es ese "Moreno" medio lorna con el que estas saliendo Morena.??,umm.. me voy pa' chincha...
J?
Es el J que estoy pensando?
(pregunta a magnus)
no... no creo
pero...
y tu comentario de las elecciones?
bueh
felicitaciones!
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